El neutrino es una partícula esquiva, en apariencia insignificante, pero necesaria para explicar el mundo. Ni la radiactividad, ni el big bang, ni el Modelo Estandar de la física de partículas serían posibles sin él. Con El neutrino, un blog nacido en febrero de 2009, el físico y escritor Germán Fernández pretende acercar al lector, y ahora al oyente, al mundo de la ciencia a partir de cualquier pretexto, desde un paseo por el campo o una escena de una película, hasta una noticia o el aniversario de un investigador hace tiempo olvidado.
Y así es. Fue el matemático francés Descartes, el mismo que desarrolló la geometría cartesiana, el que introdujo en el siglo XVII el uso de las últimas letras del alfabeto para representar las variables o las incógnitas en la notación algebraica, y reservó las primeras letras (a, b, c…) para las constantes. Otros matemáticos propusieron convenciones diferentes; por ejemplo, en el siglo XVI, el matemático francés François Viète representaba las constantes con consonantes, y las variables con vocales. Pero fue la notación de Descartes la que terminó por imponerse.
Descartes, al proponer las tres últimas letras del alfabeto para representar las incógnitas, no tenía ninguna preferencia entre ellas. Es a otro personaje menos conocido a quien debemos la ubicuidad de la x y su preponderancia sobre la y y la z. Se trata del editor de Descartes, que decidió usar la x por la sencilla razón de que de las tres era la menos usada en francés. Así podía dar uso al tipo de la x, que era el que menos se desgastaba en su imprenta.
El editor de Descartes nunca pudo imaginar la enorme influencia que tuvo su elección en el mundo actual. Más allá de las Matemáticas, le deben su nombre, entre otras muchas cosas, los rayos X, la serie Expediente X, el Lord X de la película Irma la dulce, y el posadero galo Plaintcontrix que aparece en varias aventuras de Astérix el galo, aunque éste último se llama en español Jabalix, que no tiene nada que ver; Plaintcontrix viene de plainte contre x, término legal francés para una denuncia contra persona o personas desconocidas.
Circula por ahí otra historia sobre el origen de la x que tiene más de leyenda que de realidad. Este relato se remonta al matemático, astrónomo y geógrafo persa Abu Abdalá Muhamad ibn Musa al-Juarismi, que vivió en el siglo IX. Al-Juarismi, por supuesto, escribía en árabe, y jamás usó la x. De hecho, nunca escribió una ecuación. Al-Juarismi describía los problemas matemáticos y sus soluciones con palabras y frases. En esas descripciones, a la incógnita la llamaba “cosa”, shay en árabe.
La obra de Al-Juarismi llegó a Europa siglos más tarde, gracias a la Escuela de Traductores de Toledo. En el siglo XII, Roberto de Chester y Gerardo de Cremona tradujeron su manual de álgebra Hisab al-Yabr wa’ l-Mukabala (Compendio de restauración e igualación). Aquí la historia comienza a flaquear… Según una versión, shay se transcribió xay en español, y de aquí que, al desarrollarse la notación algebraica actual, se eligiera la x para representar la incógnita. Pero la obra de Al-Juarismi se tradujo al latín, y no al español, y fue esa versión latina la que circuló por las universidades medievales durante siglos. Otra versión dice que la x es una abreviatura de la traducción latina de shay, res o radix. Pero ya hemos visto que antes de Descartes hubo otras propuestas de notación en la que la x no tenía ningún papel especial.
Lo que sí hemos heredado de Al-Juarismi son los términos matemáticos álgebra, guarismo y algoritmo. Estos dos últimos proceden de su apellido, que a su vez hace referencia a su región de origen, Corasmia, que estaba situada al este del mar Caspio y se corresponde aproximadamente con los actuales Uzbekistán y Turkmenistán. El significado del nombre de Corasmia es discutido; según unos autores significa “la tierra donde nace el Sol”; según otros “tierra baja”, y para algunos hace alusión al pescado cocido, que es la base de la alimentación de los pueblos de la región. He aquí, por tanto, el verdadero significado de las palabras guarismo y algoritmo.
OBRAS DE GERMÁN FERNÁNDEZ:
Infiltrado reticular
Infiltrado reticular es la primera novela de la trilogía La saga de los borelianos. ¿Quieres ver cómo empieza? Aquí puedes leer los dos primeros capítulos.
Apoya a CienciaEs haciéndote MECENAS con una donación periódica o puntual.
40,8 millones de audios servidos desde 2009
Agradecemos la donación de:
Angel Quelle Russo
“Vuestra labor de divulgación de la ciencia y en particular del apoyo a los científicos españoles me parece muy necesario e importante. Enhorabuena.”
Angel Rodríguez Díaz
“Seguid así”
Anónimo
Mauro Mas Pujo
Maria Tuixen Benet
“Nos encanta Hablando con Científicos y el Zoo de Fósiles. Gracias.”
Daniel Dominguez Morales
“Muchas gracias por su dedicación.”
Anónimo
Jorge Andres-Martin
Daniel Cesar Roman
“Mecenas”
José Manuel Illescas Villa
“Gracias por vuestra gran labor”
Ulrich Menzefrike
“Donación porque me gustan sus podcasts”
Francisco Ramos
Emilio Rubio Rigo
Vicente Manuel CerezaClemente
“Linfocito Tcd8”
Enrique González González
“Gracias por vuestro trabajo.”
Andreu Salva Pages
Emilio Pérez Mayuet
“Muchas gracias por vuestro trabajo”
Daniel Navarro Pons
“Por estos programas tan intersantes”
Luis Sánchez Marín
Jesús Royo Arpón
“Soy de letras, sigo reciclándome”