Cienciaes.com

Cierta Ciencia Podcast - Cienciaes.com suscripción

Cierta Ciencia

En Cierta Ciencia, de la mano de la genetista Josefina Cano nos acercamos, cada quince días, al trabajo de muchos investigadores que están poniendo todo su empeño en desenredar la madeja de esa complejidad que nos ha convertido en los únicos animales que pueden y deben manejar a la naturaleza para beneficio mutuo. Hablamos de historias de la biología.

El cerebro alucinando

El cerebro alucinando _ Cierta Ciencia podcast - CienciaEs.com

“La realidad es una ilusión, aunque muy persistente”
Albert Einstein

El LSD (Lisergic acid dietilamida o ácido lisérgico) es un compuesto que fue sintetizado en 1938 y al que se le asignó una actividad (potencial) psicoactiva en 1943. Tiene efectos profundos en la modulación de la conciencia y fue usado en investigaciones psicológicas y psiquiátricas en 1950 y 1960. Sin embargo no se contaba con ningún estudio que utilizara imágenes del cerebro que mostraran los cambios inducidos por la droga.

Cuentan quienes toman LSD que algunas veces sienten como si ese terreno fronterizo que los separa a ellos del resto de las personas se diluyera. Ahora, el primer estudio que usa las imágenes de la resonancia magnética funcional (fMRI) realizado en cerebros de personas bajo los efectos del LSD, les ayuda a los investigadores a explicar este fenómeno conocido como “la disolución del ego”, la desaparición de las fronteras entre un individuo y el resto de personas.

Los científicos del Royal Netherlands Academy of Art and Sciences en Ámsterdam publican sus resultados en la revista Current Biology, donde las imágenes sugieren que la disolución del ego se daría porque regiones del cerebro involucradas en las más complejas actividades cognitivas establecen conexiones súper numerosas y fuertes. Sus hallazgos sugieren que los estudios de drogas como el LSD y otros psicotrópicos pueden resultar en el conocimiento de funciones fundamentales del cerebro. También pueden ser fuente de información sobre la siempre intrigante naturaleza biológica de cómo se percibe la realidad, y de igual manera dar luz sobre algunas preguntas filosóficas, dicen los investigadores.

“Existe una realidad objetiva y existe nuestra realidad” dice Enzo Tagliazucchi, investigador del Royal Netherlands Academy of Art and Sciences, “Las drogas psicodélicas pueden distorsionar nuestra realidad y resultar en percepciones ilusorias. Pero la realidad que experimentamos durante algunos períodos de alerta, de alguna manera pueden ser también una ilusión”.

La visión por ejemplo: “Sabemos que el cerebro se llena de información visual cuando se ve privado de ella de improviso, que capilares sanguíneos situados en frente de la retina son borrados y no los percibimos, y que el cerebro estabiliza nuestras percepciones visuales a pesar del continuo y constante movimiento de los ojos. Entonces, cuando se toman drogas psicodélicas, estamos, se podría decir, reemplazando una ilusión por otra. Esta es una idea difícil de digerir, pero nuestro estudio muestra que el sentido de ser uno mismo, el “ego”, podría también ser parte de esa ilusión”.

Se conoce desde hace mucho tiempo que las drogas psicodélicas tienen la capacidad de reducir o aún eliminar el sentido que tiene una persona de sí misma, llevando a una experiencia tremenda en la conciencia, explica Tagliazucchi. Este estado, que es reversible en su totalidad, también se sabe ocurre en ciertos desórdenes psiquiátricos y neurológicos.

Pero nadie nunca había mirado cómo el LSD induce cambios en la función cerebral. Para hacerlo los investigadores escanearon el cerebro de 15 personas en perfecto estado de salud, mientras estaban bajo los efectos del LSD, y de las que recibieron placebo en el grupo control.

Los científicos encontraron una conectividad global aumentada en muchas de las regiones del cerebro involucradas en actividades cognitivas de alto nivel en quienes estaban bajo los efectos del compuesto. Esas regiones cerebrales mostraron una conectividad tal que se superponía de forma notoria a las regiones que ya se conocía correspondían a las zonas donde se encuentran los receptores del LSD.

El LSD incrementa también la conectividad cerebral no sólo de forma cuantitativa sino que aumenta los niveles de comunicación entre redes neuronales del cerebro situadas en otras regiones, dicen los autores. Además el incremento de la conectividad global en individuos bajo los efectos del LSD se hace de forma diferente en cada individuo, de modo que el grado de disolución del ego varía de igual manera.
Tagliazucchi resalta que el equipo encontró una conectividad global aumentada en la corteza fronto-parietal, una región del cerebro asociada con la conciencia de sí mismo. En particular, observaron una conexión mayor entre esta parte del cerebro y las áreas sensoriales, las que están a cargo de recibir información del mundo que nos rodea y que son incorporadas para su posterior procesamiento en otras áreas del cerebro.

“Esto podría significar que el LSD produce una fuerte colaboración, un compartir enorme, entre diferentes regiones cerebrales, constituyendo una unión más fuerte entre el sentido de nosotros mismos y el sentido del ambiente, diluyendo de esta manera las fronteras de nuestra individualidad”, dice Tagliazucchi.

Los investigadores también observaron cambios en el funcionamiento de una región del cerebro que anteriormente se había relacionado con experiencias de “fuera del cuerpo”, experiencias donde las personas piensan que los han perdido. “Me gustaría pensar que nuestro experimento representa una analogía farmacológica de esos hallazgos”, finaliza.

Tagliazucchi dice que los hallazgos resaltan el valor del uso de drogas psicodélicas en ensayos controlado de manera muy cuidadosa. Planea continuar usando las neuroimágenes para explorar diversos estados de conciencia, incluyendo el sueño, la anestesia y el coma. También ansía realizar comparaciones directas entre personas que están soñando con las que están en estado psicodélico. Mientras tanto, investigadores en el Imperial College London, institución que colabora también en este estudio, están investigando otras drogas psicodélicas y su potencial uso en el tratamiento de enfermedades que van desde la ansiedad a la depresión.

Interesantes investigaciones que desempolvan drogas que habían sido relegadas al olvido, las razones son muchas, y las colocan al servicio de investigaciones tan peliagudas como las que podrían desvelar nuestros secretos cerebrales más íntimos y en el camino contribuir a aliviar el cada vez más creciente sufrimiento por dolencias neurológicas. Aluciante.

Referencia:

Increased Global Functional Connectivity Correlates with LSD-Induced Ego Dissolution.
DOI: http://dx.doi.org/10.1016/j.cub.2016.02.010


Botón de donación
Apoya a CienciaEs haciéndote MECENAS con una donación periódica o puntual.
Colabore con CienciaEs.com - Ciencia para Escuchar
40,8 millones de audios servidos desde 2009

Agradecemos la donación de:

Maria Tuixen Benet
“Nos encanta Hablando con Científicos y el Zoo de Fósiles. Gracias.”

Daniel Dominguez Morales
“Muchas gracias por su dedicación.”

Anónimo

Jorge Andres-Martin

Daniel Cesar Roman
“Mecenas”

José Manuel Illescas Villa
“Gracias por vuestra gran labor”

Ulrich Menzefrike
“Donación porque me gustan sus podcasts”

Francisco Ramos

Emilio Rubio Rigo

Vicente Manuel CerezaClemente
“Linfocito Tcd8”

Enrique González González
“Gracias por vuestro trabajo.”

Andreu Salva Pages

Emilio Pérez Mayuet
“Muchas gracias por vuestro trabajo”

Daniel Navarro Pons
“Por estos programas tan intersantes”

Luis Sánchez Marín

Jesús Royo Arpón
“Soy de letras, sigo reciclándome”

Fernando Alejandro Medina Vivanco
“Ayuda”

Anónimo

Fernando Vidal

José V González F
“A nombre de mi hijo León Emiliano hacemos esta pequeña aportación. Escuchar ciencia juntos nos hace muy felices. Gracias.”

Javier Galán Cantero
“Por los grandes programas, gracias”

———- O ———-
App CienciaEs Android
App CienciaEs
App de cienciaes en apple store YouTube CienciaEs
———- O ———-



feed completo
Suscribase a nuestros programas






Locations of visitors to this page