Desde abril de 1995, el profesor Ulises nos ha ido contando los fundamentos de la ciencia. Inspirado por las aventuras de su ilustre antepasado, el protagonista de la Odisea, la voz de Ulises nos invita a visitar mundos fascinantes, sólo comprendidos a la luz de los avances científicos. Con un lenguaje sencillo pero de forma rigurosa, quincenalmente nos cuenta una historia. Un guión de Ángel Rodríguez Lozano.
Si hay aprovechados en esta vida, el parásito de la malaria, el plasmodium, es un verdadero maestro entre los seres que sacan partido de otros. El plasmodium se aprovecha de la sed de sangre de la hembra del mosquito anófeles para saltar de ser humano en ser humano y asegurarse la supervivencia. Bien mirado, el mosquito, el parásito y el ser humano son tres actores de una misma obra vital. Ulises nos habla en el programa de hoy de la vida del parásito y, como complemento, les contamos a continuación la vida del mosquito y les ofrecemos un vídeo que ilustra el proceso de infección.
El mosquito
Las hembras de mosquito no son las malas de la película, en realidad son víctimas, como nosotros. Ellas sólo quieren la sangre humana porque la necesitan para que sus óvulos maduren y la prueba es que los machos no tienen ninguna predilección por semejante alimento. No vayamos a pensar que todo mosquito viviente tiene que ver con esas prácticas ni que, por supuesto, todos los aficionados a chupar sangre vayan a transmitir la malaria.
Se conocen más de 3.500 especies de mosquitos, agrupados en 41 géneros diferentes. La malaria que afecta al ser humano es transmitida únicamente por el género anófeles, o “anopheles” si prefiere la palabra latina. Incluso entre todas las especies de anófeles, que hay unas 430 conocidas, solo entre 30 y 40 son transmisoras de la malaria. Hay mosquitos capaces de transmitir la malaria incluso en lugares donde la enfermedad ha sido totalmente erradicada, porque para ellos el plasmodium también es un parásito y pueden estar infectados o no.
Los mosquitos del género anófeles llevan una vida muy ajetreada porque, dependiendo del momento de desarrollo, son criaturas acuáticas o terrestres. Su ciclo vital pasa por fases muy diferentes: huevo, larva, pupa y adulto. Las tres primeras tienen lugar en el agua, si no hay agua, no hay mosquito.
Una hembra mosquito puede poner entre 20 y 200 huevos que son depositados todos juntos sobre la superficie del agua y van equipados, esto es realmente un adelanto tecnológico natural, con un par de flotadores para evitar que se hundan. La eclosión puede ocurrir en dos días o más dependiendo de la temperatura ambiente.
Tras la eclosión, la larva, alargada y con movimientos convulsivos, se dedica a alimentarse de algas, bacterias y otros microorganismos que nadan a su alrededor. Es un animal que respira aire así que se mantiene en la superficie del agua y sólo se sumerge cuando detecta algún peligro. Su desarrollo pasa por sucesivas fases durante las cuales se deshace del esqueleto externo, exoesqueleto, para crecer. Podríamos decir que las especies de anófeles no hacen ascos a ningún lugar donde exista agua líquida, si el agua está clara y limpia, les vale, pero viven igualmente en estanques, en los remansos de los ríos o en cualquier charco que conserve agua el tiempo suficiente como para completar su ciclo.
Cuando la larva llega a tener un tamaño considerable, sufre una metamorfosis que cambia totalmente su aspecto y se convierte en pupa. Su aspecto es muy peculiar, en forma de coma, con la cabeza y tórax unidos en una única estructura, llamada cefalotórax, y el abdomen curvado bajo él como la cola de una gamba diminuta. Dos pequeños tubos la conectan con la superficie del agua para respirar. Varios días después, dependiendo de la temperatura, el cefalotórax se abre por la parte de arriba, hacia el aire, y de su interior emerge el mosquito adulto.
El mosquito, como cualquier insecto, tiene seis patas y un cuerpo dividido en cabeza, tórax y abdomen. La cabeza contiene un equipo sofisticado de sensores especializados en la búsqueda de alimento que, en el caso de la hembra, consiste en la selección de una víctima a la que extraerle sangre. Dos ojos segmentados le proporcionan información visual, sus dos antenas largas son sofisticados detectores de olores, dos palpos, que son su sentido del tacto, acompañan a un largo tubo o probóscide que utilizará como un estilete para perforar la piel de la víctima y extraerle la sangre. Los machos, en cambio, son vegetarianos, les gusta el néctar.
Los machos suelen formar enjambres hacia los que se dirigen las hembras para aparearse.
La hembras que logran una ración de sangre, ya sea humana o de otro animal, reposan unos días mientras los huevos se desarrollan en su interior y buscan un lugar de aguas mansas donde poner sus huevos.
Visto así, el mosquito no pasaría de ser una molestia, pero el plasmodium, uno de los parásitos más extendidos y peligrosos que azotan a la humanidad, ha elegido ser su huésped de honor y lo utiliza para saltar impunemente de un ser humano a otro.
Les invito a escuchar a Ulises y a ver un vídeo que ilustra el ciclo del parásito de la malaria.
Apoya a CienciaEs haciéndote MECENAS con una donación periódica o puntual.
40,8 millones de audios servidos desde 2009
Agradecemos la donación de:
José V González F
“A nombre de mi hijo León Emiliano hacemos esta pequeña aportación. Escuchar ciencia juntos nos hace muy felices. Gracias.”
Mecenas
Héctor Vaquero Benito
Mecenas
Carlos Garcia Gutierrez
“Gracias por su gran labor divulgativa”
Mecenas
Francisco Sicilia Espuny
Mecenas
Jesús Mª Perez Carranza
Mecenas
Mario Castiñeira Garcia
Mecenas
Jurgen Goicoechea
“Entretiene y siempre se aprende.”
Mecenas
Urko Iturbe
Mecenas
Labea
Nuevo Mecenas a través de Patreon
Julia Dolores Martínez Vilela
“Gracias por entretener”
Mecenas
Frida Palacios García
Mecenas
Vicente Manuel Cereza
“Linfocito T CD8 citotóxico”
Mecenas
Anónimo
Mecenas
Jesús Antón Cayuela
Mecenas
Ernesto Mauricio Deluquez.
Mecenas
Luis Miguel Muñoz Gallo
Mecenas
Marlene Musiol.
Mecenas
Rogelio Cueva
“Saludos desde Mexico y felicidades por difundir la ciencia de una manera interesante y clara.”
Mecenas
Daniel Ocana
Mecenas
Terrence Rooney
Mecenas
Aser Sanchez Huerga
Mecenas
María D Walker
Mecenas
Juan Agustín Esteban Jiménez
Mecenas