Marina Mosquera, directora del Institut de Paleontología Humana i Evolució Social (IPHES, Tarragona) nos invita hoy a visitar, una vez más, un lugar, único en el mundo, que alberga un tesoro arqueológico de valor incalculable: el conjunto de yacimientos de la Sierra de Atapuerca. Mosquera recalca que no se trata de un único yacimiento, sino de un conjunto de ellos, cada uno de los cuales está proporcionando valiosa información sobre los seres humanos que habitaron el lugar durante, al menos, un millón cuatrocientos mil años.

Atapuerca es una sierra kárstica, en cuyo interior existen multitud de cavidades formadas por la disolución de la piedra caliza que la compone. Algunas de esas cavidades se abrieron al exterior en algún momento de su existencia, y poco a poco el material que se colaba por la abertura fue rellenando la cueva hasta colmatarla en muchos casos. Ese material de relleno contiene, acumulado en capas de sedimento ordenadas desde las más antiguas y profundas hasta las más recientes, información sobre el clima, la fauna y la flora existentes en cada momento a lo largo de miles o millones de años.

Por esta razón hablamos de múltiples yacimientos distintos, cada uno con sedimentos de diferentes periodos que deben ser excavados de manera independiente. Un cada uno de los yacimientos, equipos de expertos en múltiples disciplinas arañan en cada campaña de excavación unos centímetros de sedimento, documentan todo lo hallado y lo preservan. Esas investigaciones se superponen año tras año, campaña tras campaña, escribiendo así las páginas de un libro que narra la historia de cada lugar.

Un magnífico resumen de todo ese trabajo lo podemos encontrar ahora en un libro titulado: ATAPUERCA. El gran tesoro arqueológico que ilumina los secretos de la evolución humana . El libro es una colección de relatos en los que distintos investigadores ofrecen una visión científica y detallada de las labores y descubrimientos que han tenido lugar hasta ahora en los yacimientos más importantes de la Sierra de Atapuerca y nos informa sobre la dieta, tecnología y el paleoambiente que rodeo a los homininos que pasaron por el lugar de distintas épocas. El conjunto está coordinados por Marina Mosquera, una de las investigadoras principales del proyecto de los yacimientos de Atapuerca y nuestra invitada hoy en Hablando con Científicos.

Marina nos acerca a yacimientos como La Sima de los Huesos, descrita en el libro por el investigador Carlos Lorenzo. La Sima de los Huesos es una cavidad de siete metros de largo y tres de ancho, situada en el fondo de un profundo y estrecho pozo vertical de 13 metros de altura. Allí se han encontrado restos de más de 30 personas, junto a infinidad de restos de osos, zorros, lobos, leones y otras criaturas que en algún momento se despeñaron o fueron lanzados intencionadamente por la abertura, quedando atrapados allí para siempre.

En otro de los relatos, Xosé Pedro Rodríguez Álvarez habla del yacimiento de la Sima del Elefante, lugar en el que se han encontrado los restos humanos más antiguos, pertenecientes a un individuo que vivió hace casi 1.400.000 años y cuya especie aún no se ha identificado. Según comenta Marina durante la entrevista, no tardaremos en conocer nuevos descubrimientos obtenidos durante las últimas excavaciones.

Así, Marina Mosquera va desgranando durante la entrevista algunos de los aspectos más interesante de otros yacimientos, como La Gran Dolina, donde se descubrió el Homo antecessor, la Cueva Fantasma, el Complejo Mirador o la Galería de las Estatuas, entre otros. En total, se están excavando actualmente 11 yacimientos distintos en la Sierra de Atapuerca, y cada uno de ellos tiene un valor excepcional que en muchos casos van más allá de los restos humanos que albergan porque proporcionan información sobre las herramientas que utilizaron, su modo de vida, la alimentación, la genética, el clima y el ambiente en el que vivieron y murieron.

Os invito a escuchar a Marina Mosquera, investigadora principales del conjunto de yacimientos de la Sierra de Atapuerca y directora del Institut de Paleontología Humana i Evolució Social (IPHES, Tarragona).